La clave para mantener el peso ideal está en el equilibrio y la disciplina.
1. Las cantidades
Es el mayor secreto, y mientras no te excedas en porciones, puedes comer y beber casi de todo. Servirse en platos más pequeños es una buena medida para no excederse.
2. Evita ingredientes cremosos
Por ejemplo, si vas a cenar o a preparar una pasta, trata de que no sea cremosa, mejor prepárala con tomate, hierbas finas o pesto, que es una grasa saludable.
3. Satisface tu apetito primario
Empieza comiendo una ensalada verde y después el resto de los platos, esto va a permitir que moderes tus siguientes porciones y no comas de más. Ojo con picar entre comidas, mejor espera a la hora de sentarte a la mesa.
4. ¡No agregues más azucares!
Lo ideal es no combinar lo que tomes con refrescos y zumos envasados o mezcladores que tengan más calorías de las que ya tiene el alcohol. Opta por bebidas cuya base sea agua carbonatada, en las rocas o directo. Está bien tomarse una mimosa, ¡una!, porque no vas a evitar todo, pero sí modérate en lo que estas bebiendo. Un día se puede. No te preocupes si te sale una comida o una cena el fin de semana. Come lo que más te apetezca, pero hazlo solo un día, no todo el mes.
5. ¿Los postres?
Habría que elegir las opciones más saludables; por ejemplo, los bizcochos de frutas y las gelatinas son una buena alternativa, olvídate de pasteles llenos de nata montada.