Estar presente, tanto física como mentalmente, en todos los aspectos de tu vida es algo que a día de hoy no es tan fácil como parece. Las preocupaciones del trabajo nos asaltan la mente cada dos por tres, el móvil nos atrapa durante una conversación familiar y el pensar todo lo que tienes que hacer al llegar a casa te impide disfrutar, como se debe, de una buena comida con amigos.
Es decir, cada vez hacemos las cosas más «a lo loco», pensando en qué es lo próximo que tenemos que hacer y no disfrutamos del momento presente. De ser consciente de esto, nace la filosofía ‘mindful‘, que tanto llevas oyendo y que tan bien representa esta teoría de la que estamos hablando. Un paso más surgió con el ‘mindful eating‘, si te preguntas por qué no funciona tu dieta, puede que sea por esto.
Y ahora esta filosofía se ha pasado al mundo del fitness. Pero, ¿realmente funciona? Si eres de las que corre en la cinta mientras hablas por whatsapp, esto te interesa, ya que es la importante estar presente y ser consciente durante el entrenamiento.
Es cierto que en un primer momento asociamos el ‘mindful’ a disciplinas como el yoga o el pilates pero, si esto no es lo tuyo, ¿no puedes entrenar de forma consciente? Error. Según estudios, esta filosofía se puede aplicar a todos los campos de la actividad física. «Se obtienen mejores resultados si eres consciente de lo que haces en ese momento, de cómo te mueves, de tu respiración, qué musculatura debe activarse según el tipo de ejercicio… Esto se puede llevar a cualquier disciplina. Consiguiendo mejores resultados en la misma, reduciendo el nivel de estrés ya que nuestra mente desconecta de los problemas cotidianos y se centra solo en la experiencia presente y, por supuesto, reduciendo el número de lesiones».
Entrenar de forma consciente es importante, sobre todo si quieres cumplir tu objetivo (tonificarte, perder peso, ganar masa muscular…). «De esta forma se aumenta la concentración y nuestra eficiencia a la hora de a realizar actividad física, además de que ganamos consciencia de nuestro propio cuerpo, consiguiendo una mayor eficacia, control y reducción de riesgo de lesiones en la práctica deportiva».
Además, concentrarte en tu entrenamiento te ayuda a despejar la mente, algo muy saludable también teniendo en cuenta el ritmo de vida que llevamos. Después de un entrenamiento consciente no solo tu cuerpo habrá liberado tensiones, tu cabeza también estará más relajada. Si te cuesta liberarte y poner la mente en blanco, te aconsejamos que realices deportes que requieran especial atención, como el boxeo. Memorizar las series que tienes que realizar con tus compañeros y estar atenta para esquivar los golpes no deja cabida a otros pensamientos en ese momento.
Si ves que te cuesta, otra de nuestras recomendaciones es que hagas ejercicio acompañada. La importancia de la relación entrenador-cliente para mantenerse consciente del ejercicio que realizamos. «Conseguimos crear un vínculo entre el entrenador y el cliente que nos ayuda a conocer las necesidades de cada cliente. Este ve resultados de acuerdo a sus objetivos y recibe un seguimiento por parte del personal».
¿Significa todo esto que debemos huir de la tecnología, que suele ser una gran distracción, cuando estamos entrenando? ¿Qué pasa con las que hacemos ejercicio con ayuda de apps? También lo consultamos; «La tecnología es positiva, muchas apps ayudan a la hora de la planificación del entrenamiento, de hecho, en nuestros centros lo hacemos así porque ayudan a tener un registro de los resultados de nuestro entrenamiento y esto es muy beneficioso para crear adherencia en la práctica de actividad física».
Llevar el registro de nuestros progresos, contabilizar las calorías que quemamos, rutinas de entrenamiento sugeridas… Eso sí, pero ¿estar en la elíptica consultando Instagram? «No mientras se está realizando el entrenamiento, ya que puede distraernos y nos impide concentrarnos en nuestro propio cuerpo y en las sensaciones que este experimenta mientras entrenamos. Es por ejemplo el caso de apps vinculadas con nuestras redes sociales hacen que volvamos a conectar con nuestra vida diaria y no nos permiten centrarnos en la propia experiencia.
Disfruta de cada momento que estás viviendo que no vas a volver a vivirlo. Siente tu cuerpo, tus músculos y tu cansancio mientras estás entrenando y deja todo lo demás para más tarde, solo así conseguirás de una forma más efectiva el objetivo que quieres lograr.